domingo, 15 de mayo de 2011

En torno a un texto: Tony Bennett, "Museo" en Ideas recibidas, MACBA, 2010

En esta "primera entrega" de nuestras reflexiones sobre textos concretos, hemos elegido uno del británico Tony Bennett sobre el concepto y la historia de la institución Museo. Este texto forma parte de la publicación Ideas recibidas (MACBA, 2010), que no es otra cosa que la transcripción de unas jornadas realizadas en el museo, con invitados de lujo, en las que se desarrollaron conceptos fundamentales del vocabulario sobre el mundo del arte.
Aunque el texto de Bennett plantea un montón de cuestiones de las que podríamos hablar hasta cansarnos, he seleccionado solamente tres citas sobre las que haré algunos comentarios y más preguntas (este es un espacio de diálogo). Empecemos:
"El museo, como el laboratorio, funciona sobre todo a partir del desarraigo de los objetos de su contexto original. En ese proceso de abstracción los objetos paradójicamente pasan a ser "sí mismos" -al margen de las ataduras contextuales que los vinculan a ritos culturales y religiosos contingentes- y a la vez a ser otra cosa, signos susceptibles de ser recombinados de una manera aparentemente natural y transparente -tal y como sucede en la ciencia- dentro de la producción de un discurso de la memoria, de la comunidad, de la nación y de la humanidad".
Creo que este párrafo resume perfectamente un debate fundamental que surgió con el nacimiento de los museos, y que continúa hoy. Una pieza "museizada" está siempre descontextualizada y, por tanto, al borde del abismo de su significado y, sin embargo, eso permite infinitas posibilidades nuevas de resignificación y reinterpretación, aparentemente desde la asepsia del cubo blanco que es la sala del museo. Esto genera discursos ¿interesados? ¿Sobre qué base estamos construyendo nuestras narraciones en torno al arte?
Sigamos con otra cita, muy relacionada con estas preguntas:
"La mejor forma de entender los museos consiste en percibir que proporcionan un entorno hecho al gusto del consumidor de cara al despliegue de una amplia gama de saberes por medio de los cuales esos objetos, textos y obras de arte que se reúnen en el museo experimentan una resocialización, se adaptan a nuevos usos e intenciones, como parte de las tecnologías de la cultura que actúan sobre lo social".
"Un entorno hecho al gusto del consumidor"; fundamental para el éxito de cualquier museo o galería, ¿no? "Despliegue de una amplia gama de saberes"; ¿no ocurre que muchas veces los discursos expositivos tratan de tocar demasiados "palos", incluso de forma algo forzada? "Como parte de las tecnologías de la cultura que actúan sobre lo social"; Foucault está presente a lo largo de todo el texto de Bennett, y ¿también en los museos?, ¿son los museos otra institución para el control social (hoy)?
Por último:
"La concepción del museo que propugna James Clifford, esto es, el museo como zona de contacto que organiza los espacios de la interacción dialógica entre distintas comunidades, y los proyectos museísticos que aspiran a disolver las identidades específicas de la nación y la comunidad en una serie de identidades híbridas que salvan toda clase de límites territoriales y que se hallan en un flujo constante".
¿Es esta propuesta de Clifford posible en nuestro mundo trans/inter/multi-cultural?, ¿hay alguna institución o proyecto que la haya puesto en práctica con éxito?

2 comentarios:

  1. Bueno Elena, menuda selección!
    Me voy a mojar y empenzando por el final, iré del museo al objeto en lugar del objeto al museo, soy así de rebelde.
    Empiezo por el final, porque me parece la base.
    Primera pregunta y fundamental, ¿De qué tipo de museo hablamos? Porque no es lo mismo un museo de arte egipcio en Londres, que el MoMA, que el Museo Fenicio de Cádiz... Pero vamos a decir que es un museo de arte contemporáneo tipo. Y a partir de ahi:

    ¿De verdad quieres un museo que funcione como disolvente de identidades específicas de la nación? Es decir, el museo es un espacio efectivamente de flujo constante, pero no le veo el sentido a esa "desinfección", es más, el museo es un espacio marcado profundamente por las diferentes identidades, el objeto del museo para mí ha deser la convergencia y no la unificación.

    Si bien es cierto que en muchas ocasiones ese whitecube rescinde los lazos culturales o folclóricos del objeto, y ese nivel de comprensión de la obra que requiere los conocimientos sociales y culturales que solo se dan en el entorno desaparece, no hemos de tomarlo como un punto de partida, si no como un punto a solucionar.
    Me parece interesante entonces el concepto de "resignificación de los objetos", preguntas que sobre qué estamos construyendo nuestras narraciones en torno al arte. Pues bueno, yo te diría que muy a mi pesar, en una falsa multiculturalidad y democracia.
    Yo, como bien sabes elena, de la práctica museística no sé mucho (y espero aprender más post tras post) pero sí que sé de reacciones y de intercambio público-arte-público. Y al fin y al cabo estas reflexiones son bastante extrapolables al contexto de la galería y los centros de creación.
    Y aquí voy con la frase de -"Un entorno hecho al gusto del consumidor"; fundamental para el éxito de cualquier museo o galería, ¿no? "Despliegue de una amplia gama de saberes"-.

    No hay duda, un entorno hecho al gusto del consumidor, y que se adapta a la multiculturalidad ya no tanto geográfica del público, si no de clases.
    Esta es la idea en principio, lo cual no significa que sirva de algo. Creo que no hace mucho te comentaba la famosa conferencia esta que me cambió la vida de Nina Montmann, en la que entre otras muchas cosas se hablaba de la problemática que se creaba en los grandes museos que son ya grandes marcas. Espacios asépticos, en los que entre las piezas y el 90% de los visitantes la conexión es nula, gran parte de los potenciales visitantes no van o pasan por él sin pena ni gloria, ya que no se sienten aceptados en el entorno (así que de amplia gama de saberes, nada de nada) y conectan con el objeto expuesto. Por lo tanto, la finalidad del museo que tendría que ser acercar otras culturas, otros conocimientos, conectar ideas y conceptos externos e internos del visitante, se pierde en la nada de las pulcras paredes bien iluminadas.
    ¿Tú qué dices?

    Andrea

    ResponderEliminar
  2. ¡vamos al lío!
    volviendo a lo de clifford y su museo ideal (teniendo en cuenta que él es historiador a secas), yo entiendo que su propuesta no es un espacio expositivo que disuelva las identidades en una masa aséptica, sino que las "disuelva" en otras híbridas, más flexibles y más proclives al cambio. esas identidades, vamos de decir "híbridas", me parecen más cercanas al discurso de los museos de arte contemporáneo, sin entrar por ahora en el tema de la asepsia y la conexión con el público. en fin, simplemente me parece que lo que proponen clifford y bennett, o lo que yo veo que proponen y me gusta, es que los museos deben ser lugares de encuentro, precisamente como tú dices, trans/inter/multi-culturales, en los que las personas puedan "tomar" cosas, conceptos, imágenes, conocimientos, lo que sea, y añadirlos a su bagaje personal. algo así.
    resignificar los objetos artísticos me parece estupendo, supongo que sobre todo como historiadora del arte, porque cualquier producto o producción cultural tiene tantas aristas como ojos lo miren. o sea que en principio tampoco me parece mal la descontextualización que genera el cubo blanco. es verdad que algo de pedagogía en el museo ayuda, y es buenísima, pero bueno, creo que a estas alturas de la película ya es algo muy aceptado que el museo desarraiga y sacraliza, y todos lo tenemos en cuenta a la hora de reflexionar sobre lo que vemos en él.
    ahora bien, esto también favorece esos discursos a veces interesados, esas narraciones sobre el arte que quizá hacemos demasiado a la ligera, y es lo que más me preocupa (desde hace años). no sé si cualquier obra se puede adaptar a un nuevo significado, si se puede decir cualquier cosa sobre cualquier obra, si se puede adaptar cualquier narración al gusto del consumidor. acercar, siempre; travestir, con cuidado :-P
    el tema de los museos como marcas da para mucho, ¿lo tocaremos algún día? ;-)

    ResponderEliminar